En un primer momento la zozobra por el resultado, el cansancio y porque no decirlo cierta relajación en nuestra vigilancia, permitieron a los tres imberbes del grupo adelantarse a todos y conseguir la pole en la mesa. Con gran habilidad y sorteando parroquianos alcanzaron la barra donde haciendo gala de un dominio inhabitual en gente tan joven y con mucha sangre fría lograron las tres primeras de la noche, gran ovación merecida.
Mientras tanto en los vestuarios se vivían momentos muy tristes, con gran sorpresa por nuestra parte, la banda derecha en pleno se negaba a dispensar agua caliente y tuvimos que volcar todo nuestro juego a la banda izda. (riguroso, solo dos tíos por ducha que luego vienen los embarazos no deseados), solo un valiente o un inconsciente desafiaba la lógica y oscilaba, cual péndulo alocado, en ambas bandas, angélito.
Tras estos escarceos, llego el momento del reparto de analgésicos pudiendo los interesados elegir entre "Radio Salil" u otra pomada que gentilmente aportaba el máximo goleador colorao. Untes en varias zonas maltrechas después (incluidos los huevos de un inconsciente que no se apercibió de que tenía la mano llena de "radio salil", sniff), nos dispusimos a la conquista del territorio perdido en manos de los pipiolos que sin ninguna vergüenza daban buena cuenta de su merecido refrigerio.
Atacando por oleadas fuimos doblegando las defensas que nos salían al paso y finalmente y con un brindis tradicional al "movimiento espartano" pudimos abordar la ingesta de nuestras primeras birras con gran regocijo de nuestros sedientos gaznates.
Fue en ese momento cuando hicimos recuento y nos dimos cuenta del gran número de bajas que habíamos sufrido, la presión había sido excesiva y muchos no pudiendo soportarla tuvieron que abandonar, aprovechamos todos para brindar por su ausencia y dar buena cuenta de la segunda de la noche (por gentileza de Humberto, que se repita muchas veces).
Llegados a este punto la resistencia de algunos falló y los incombustibles nos vimos obligados a mantener alto el pabellón y reorganizando posiciones atacar a la última de la tarde. Alguna escaramuza con las salchichas y patatas (correosas) y poco más dio de si este tercer tiempo que tuvimos que abandonar no sin cierta pena dado que cerraban el bar y nuestras respectivas iban a echar el "FAC".
Y siendo las 9:30h aprox. finalizamos ese tercer tiempo.
Mientras tanto en los vestuarios se vivían momentos muy tristes, con gran sorpresa por nuestra parte, la banda derecha en pleno se negaba a dispensar agua caliente y tuvimos que volcar todo nuestro juego a la banda izda. (riguroso, solo dos tíos por ducha que luego vienen los embarazos no deseados), solo un valiente o un inconsciente desafiaba la lógica y oscilaba, cual péndulo alocado, en ambas bandas, angélito.
Tras estos escarceos, llego el momento del reparto de analgésicos pudiendo los interesados elegir entre "Radio Salil" u otra pomada que gentilmente aportaba el máximo goleador colorao. Untes en varias zonas maltrechas después (incluidos los huevos de un inconsciente que no se apercibió de que tenía la mano llena de "radio salil", sniff), nos dispusimos a la conquista del territorio perdido en manos de los pipiolos que sin ninguna vergüenza daban buena cuenta de su merecido refrigerio.
Atacando por oleadas fuimos doblegando las defensas que nos salían al paso y finalmente y con un brindis tradicional al "movimiento espartano" pudimos abordar la ingesta de nuestras primeras birras con gran regocijo de nuestros sedientos gaznates.
Fue en ese momento cuando hicimos recuento y nos dimos cuenta del gran número de bajas que habíamos sufrido, la presión había sido excesiva y muchos no pudiendo soportarla tuvieron que abandonar, aprovechamos todos para brindar por su ausencia y dar buena cuenta de la segunda de la noche (por gentileza de Humberto, que se repita muchas veces).
Llegados a este punto la resistencia de algunos falló y los incombustibles nos vimos obligados a mantener alto el pabellón y reorganizando posiciones atacar a la última de la tarde. Alguna escaramuza con las salchichas y patatas (correosas) y poco más dio de si este tercer tiempo que tuvimos que abandonar no sin cierta pena dado que cerraban el bar y nuestras respectivas iban a echar el "FAC".
Y siendo las 9:30h aprox. finalizamos ese tercer tiempo.